Arte

Había estado muy ocupado y muy distraido. Que si peleas con Slytherins, que si castigos por mi mal comportamiento... La verdad, yo creo que mi mala actitud era provocada por culpa de mi pequeño enfrentamiento con Aisha. Hoy, seguia sin entender porque me mintió, porque me dijo eso de que estaba embarzada. ¿Porque me engañó?. Negué con la cabeza para evadirme y salí a fuera. Queria estar solo, y quería estar tranquilo. Así que me dirigí al lago. Quizas con suerte me encontraría al calamar gigante. Iba con los pantalones y la camisa del uniforme. La túnica, el jersey y la corbata la dejé en la habitación. Mi varita la guardé en el bolsillo de atrás. Al fin llegue al lago. El lago de Hogwarts se encontraba al sur del castillo. Se decía que medía más de ochocientos metros de diámetro y las cañerías de Hogwarts desembocan en él. Ademas de vivir allí el calamar gigante, tambien existía una colonia de Sirenas. Esto último no estaba muy seguro, pues aun no había visto ninguna. Pero bueno, tiempo al tiempo. Me senté a escasos metros de la orilla, y tras coger una piedra y tirarla al lago posteriormente, me tumbé en el cesped, mirando el bonito atardecer que me ofrecía Hogwarts.